Dra. Sulay Villalobos de Vega
Especialista en Obstetricia y Ginecología
Una buena alimentación de la mujer antes, durante y después del embarazo, es fundamental para lograr salud y bienestar, tanto de ella como de su hijo en su vientre prominente. Por tanto, la dieta materna tiene que aportar nutrientes energéticos como proteínas, carbohidratos y grasas, y no energéticos como vitaminas y minerales en cantidad suficiente que permita la formación del feto, su crecimiento y desarrollo durante los nueve meses de gestación. De allí, la dependencia del feto del organismo materno es completa. Todos los nutrientes que recibe el feto son transferidos desde la madre a través de la placenta.
Así, cuando la mujer mantiene la misma actividad física que tenía antes de quedar embarazada, las necesidades de energía aumentan durante el embarazo en 300 Kcal/día. Con este aporte extra, se produce una ganancia de peso de 12 a 13 Kg aproximadamente durante el embarazo.
Las mujeres sanas antes del embarazo, con una alimentación normal sólo tienen una pequeña probabilidad de sufrir alteraciones nutricionales importantes durante la gestación. El factor que tiene mayor influencia sobre el peso al nacer, es el estado nutritivo antes del embarazo.
Recomendaciones Dietéticas Generales Durante el Embarazo:
1. La dieta óptima diaria debe aportar un 10-15% de la energía en forma de proteínas, un 55-60% en la forma de hidratos de carbono y menos del 30% en forma de lípidos.
2. Es preferible que a lo largo del día se realicen 5 ingestas: desayuno, almuerzo, cena, y 2 meriendas, a las 10:00 am y 3:00 pm.
3. Consumir diariamente, cereales, frutas, verduras, tubérculos, hortalizas, y leguminosas.
4. Consumir diariamente ½ litro a un litro de leche pasteurizada preferiblemente descremada o semidescremada.
5. Consumir pecado, específicamente de piel azul, por su alto contenido de ácidos grasos poli-insaturados (Omega 3). Se cuentan el atún, salmón, jurel, sardina. Se recomienda el consumo de tres raciones semanales.
6. Limitar el consumo de aceites y grasas. Evitar los guisos y las salsas tipo mayonesa, mantequilla, manteca, entre otros.
7. Consumir quesos blandos como requesón, queso crema, ricota pasteurizado, blanco pasteurizado o queso de cabra.
8. Consumir diariamente 5mg de Ácido fólico.
9. No consumir café, té o infusiones excepto el tilo y la manzanilla en caso de insomnio. Asimismo, está prohibido el consumo de alcohol y tabaco durante todo el embarazo.
Es primordial que la mujer durante los 9 meses de gestación acceda a una buena alimentación que asegure el aporte energético para mantener la salud durante el embarazo y que a su vez garantice efectos saludables demostrables sobre el crecimiento del feto in útero y el desarrollo psicomotor al nacer.