¡Navidad! Es una época del año que las personas esperan con ilusión. ¿Por qué? Para algunos es la fiesta donde la familia se reúne para una comida especial y regalos. Es una época para otras festividades que van apuntando al día de la Navidad, como las reuniones con amigos o compañeros de trabajo. Para muchos, es tiempo de saludos e intercambio de tarjetas, es la ocasión para ponerse al día con amigos y familiares. Es también el tiempo de preparación y anticipación. Se invierten muchos días decorando la casa, cocinando, pensando en los regalos para cada uno. Hacer regalos puede ser un verdadero arte; a algunos les gusta elegir con mucho cuidado el regalo apropiado para la persona que aman.
La Navidad es uno de los días más esperados por todas las familias, en especial por los niños. En los hogares se aprovecha para compartir, reunirse y celebrar en armonía.
La importancia de que los niños compartan la Navidad en familia no solo radica en el hecho de recibir regalos, sino más bien de una época donde esperan recibir demostraciones de cariño y afecto, compartiendo momentos inolvidables con sus seres queridos.
Estas demostraciones ayudan a fortalecer su identidad, estima y apreciación. Así mismo se aprenden a cultivar los valores de la bondad, la generosidad, el amor, la amistad, y la importancia que tiene ser agradable y agradecido con el resto de las personas que le rodean. Los valores son útiles y necesarios durante todos los días de sus vidas, pero no siempre se demuestran, a veces, se olvidan elementos esenciales para convivir como personas, rodeados de amor y acuerdo.
Es importante mencionar que la Navidad es buen momento para renovar ilusiones, evaluar los aspectos negativos y positivos vividos, orientando las metas y propósitos para el año próximo, incentivando la importancia que tienen los valores en la educación, para convertirse en mejores personas. De igual forma, es un buen momento para motivar a sus hijos a pensar en los más necesitados y vulnerables, siendo solidarios y entregar desinteresadamente. Estos son buenos motivos para celebrar y ser partícipes de la Navidad.
En esta época compartir las tradiciones en familia y transmitir la importancia de dar y recibir amor, alimentar el espíritu y disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, se convierten en el mejor regalo que pueden ofrecer a sus seres queridos.
Son diversas las frases que oímos a menudo en la Navidad: “Paz en la tierra y buena voluntad para con los hombres”. ¿Pero cómo podemos sentir paz y experimentar buena voluntad en la tierra entre tantas luchas y terror? . Personalmente considero que solo podemos encontrar paz, esperanza y buena voluntad, aceptando el regalo más grande que jamás se haya hecho. El regalo de amor que Dios nos envió, al enviarnos a Su Hijo Jesús. Cuando celebremos su nacimiento otra vez en esta navidad, con nuestras diferentes maneras, con nuestras diferentes costumbres y culturas, pedimos a Dios que puedas encontrar la paz y la esperanza aceptando su maravilloso regalo de Navidad, Jesucristo.
Yulissa Pacheco
Orientador Familiar
Emprendedora/ Autora
Instagram: lomejordesermama
Twitter: Yulissa Pacheco
www.yulissapacheco.com